Las determinaciones urbanísticas del área no permiten aplicar criterios bioclimáticos de captación solar pasiva en todas las fachadas. No obstante la configuración del nuevo bloque en L hace que este se “cierre” a las orientaciones más desfavorables, y se “abra” hacia las orientaciones más benignas, lo que se aprovecha para situar un área de terraza-solarium en la zona central.

La propuesta se basa en una clara modulación y configuración de la nueva ala edificada que permita el perfecto funcionamiento polivalente solicitado tanto en cada una de sus plantas como en el funcionamiento de todo el nuevo edificio y su futura ampliación. Para ello se adopta una distribución basada en la configuración principal del bloque en L de plantas elevadas, el cual se ordena según un esquema simétrico apoyado en su diagonal, y que se complementa con un nuevo cuerpo interior en sus plantas inferiores, según la envolvente cuadrada de estos niveles, pero que sigue respetando la base de configuración en L gracias a la incorporación de un patio interior apoyado en ella que introduce luz y ventilación natural a todos los niveles, incluido el sótano.

Esta configuración de ordenación diagonal apoyada en un esquema de planta cuadrada sigue las directrices de desarrollo habituales en la arquitectura de Víctor Eusa, previamente utilizados en el edificio principal de la propia Casa de Misericordia.

• Cada planta se ordena a partir de 3 núcleos de comunicación vertical, que se unen gracias a un distribuidor central y que, conjuntamente con las áreas de servicio, nos ordena las habitaciones de residentes en 4 áreas por planta.
• Cada una de las habitaciones cuenta con un cuarto de baño propio y se configura para un uso polivalente, preferentemente individual pero de dimensiones que permiten su uso como habitación doble pudiendo, a su vez, ser utilizada en todas las configuraciones como habitación de válidos, de residentes con dependencia leve e incluso para residentes con gran dependencia, pudiendo conformarse todas ellas como una habitación de hospitalización, pudiendo destinar una planta completa a este requerimiento. Esto permite gran ductilidad de usos y flexibilidad de organización.
• Todas las habitaciones cuentan con un espacio de mirador en vuelo, que cambia de posición de unas plantas a otras, y que proporciona un ámbito de desahogo de cada una de estas unidades residenciales. También cuentan con un armario doble empotrado y sus dimensiones permiten diferentes configuraciones, siempre a partir del esquema base de habitaciones individuales.
• Las entradas a las habitaciones se agrupan de dos en dos y se retranquean del distribuidor principal, lo que facilita los giros en los accesos a todas estas unidades residenciales. A su vez no se enfrentan en cada lado del distribuidor principal, evitando así el efecto “pasillo de hospital”, reforzando el juego de los distribuidores con la incorporación de elementos de color en paramentos y pavimentos que permiten identificar cada ámbito.

La propuesta constructiva se basa en la experiencia adquirida por todo el equipo redactor en edificios dotacionales con un especial compromiso por minimizar el posterior mantenimiento y, a su vez, pretende seguir, de modo general, los parámetros de una construcción respetuosa con el medio ambiente y para ello hará especial incidencia en los tres aspectos fundamentales que la definen: ahorro energético, utilización de energías renovables y construcción con materiales naturales y sanos.

En la propuesta se aplican la mayor cantidad posible de aspectos bioclimáticos según las directrices de la denominada “matriz bioclimática”, metodología desarrollada por los responsables del equipo técnico.

Las medidas pasivas adoptadas permiten potenciar la iluminación natural, con el ahorro que ello supone. A su vez las estrategias para evitar sobrecalentamientos en todos los locales permiten que las necesidades de refrigeración en este tipo de climatología se vean totalmente cubiertas.